Tres tantos del Celta acabaron por derrotar a un Málaga que jamás se dio por vencido. Dos perdidas absurdas y una jugada a balón parado hicieron inútil el gol en propia puerta del danés
El City consiguió la victoria de la visita del Burnley al estadio y lo logró, prácticamente, por culpa del Kun, que volvía a ser el salvador de su equipo un encuentro más. El internacional, que empezó en el banquillo, dio vida al ataque y, ayudó, con un tanto, a que el luminoso marcase 2-1 al finalizar. Hubo protestas en el gol visitante, conseguido por Mee, al ser un gol fantasma.